De las primeras cosas que nos viene a la cabeza cuando intentamos empezar una dieta o comer saludable, es cómo comer y preparar lechuga sin morir de aburrimiento, ¿verdad? Hoy traigo una idea diferente de ensalada para acompañar nuestros platos: Cogollos de lechuga al ajillo. Son riquísimos y fáciles de hacer. Como siempre intento conseguir con todas mis recetas, una opción rápida y saludable a la vez que deliciosa para que nuestras comidas sean variadas.
Ingredientes de los cogollos de lechuga al ajillo
— 1 cogollo de lechuga mediano
— 2 dientes de ajo
— Aceite de oliva virgen extra
— Sal marina o sal del Himalaya (opcional)
— Pimienta negra molida
— Taquitos de jamón serrano
Nuestros cogollos de lechuga al ajillo, ahora a la cocina
Para comenzar, lavamos muy bien el cogollo de lechuga y lo partimos longitudinalmente por la mitad. Lo reservamos.
En una sartén añadimos un buen chorro de aceite de oliva virgen extra y lo calentamos. Mientras se calienta el aceite, pero con cuidado de que no se queme, picamos en cuadritos muy pequeños los dientes de ajo y los doramos en el aceite caliente. Cuidado no quemar los ajos, ya que se cocinan con mucha rapidez.
Una vez tenemos el ajo dorado, lo vertemos por encima de los cogollos. Añadimos a continuación el jamón picado por encima y condimentamos con un poco de pimienta negra molida al gusto. A esta ensalada no es necesario añadirle sal, puesto que el jamón serrano ya es bastante salado, pero si así lo prefieres, puedes añadirle un poco. No te lo recomiendo, para no aumentar la cantidad de sal consumida en la comida.
Estos cogollos de lechuga al ajillo son una idea diferente de comer lechuga y vegetales frescos. Le damos un toque diferente y sabroso gracias al ajo y a la vez, mantenemos la frescura de la lechuga ¡te encantará!