Entre los meses de primavera y verano la naturaleza nos regala los frutos rojos, también conocidos como frutas del bosque. De delicioso sabor y un tesoro a nivel nutricional. En estos meses están en temporada y son de proximidad, por lo que están mucho más sabrosos y son más nutritivos que en cualquier otra época del año.
Cuando vayas al supermercado comprueba que en su etiqueta los frutos rojos sean de productores locales y fíjate bien en su color. Cuanto más intenso sea, mejores serán sus propiedades. Los más conocidos y utilizados son las fresas, las frambuesas y los arándanos, pero también es muy habitual encontrar grosellas, cerezas o moras.
Beneficios de los frutos rojos
** Cuidan de tu corazón gracias a sus flavonoides y polifenoles que tienen propiedades preventivas y protectoras de la salud cardiovascular. Su consumo ayuda también a reducir el riesgo de tener la presión arterial alta y aumenta los niveles del colesterol ‘bueno’.
** Te ayudan a bajar de peso de forma saludable. Los frutos rojos tienen muy pocas calorías, en torno a las 30-40 por cada 100 gramos de fruta. Tienen un bajo índice glucémico que no eleva en exceso el azúcar en sangre por lo que son ideales para las personas diabéticas. Además, aportan bastante fibra soluble facilitando el tránsito intestinal y aportando sensación de saciedad. Son depurativos y diuréticos y ayudan al organismo a eliminar toxinas y a evitar la retención de líquidos.
** Son aliados de la belleza. Su enorme poder antioxidante combate los radicales libres, responsables de la degeneración celular, y potencian la síntesis de colágeno, previniendo el envejecimiento prematuro de la piel y reduciendo las arrugas.
Muy versátiles en la cocina
Por otro lado, los frutos rojos alegran cualquier plato y puedes consumirlos de diversas maneras porque son muy versátiles y vistosos:
** En tu desayuno, con yogur, frutos secos, semillas o cereales.
** Como snack o merienda, comiéndolos solos o acompañados de crema de cacahuete o un cuadrito de chocolate negro.
** En zumos o batidos, porque hidratan y nutren a la vez que son deliciosos.
** Para reinventar tus ensaladas y platos de carne y pescado añadiéndolos troceados o haciendo salsas y mermeladas con ellos. Además, como son ricos en vitamina C al comerlos en tu plato de carne tu cuerpo va a absorber el hierro mejor que si comes la carne sola.
** Son alimentos estrella para tus dulces y helados caseros.
Si no vas a consumirlos pronto puedes congelarlos en una bolsa zip, y si quieres disfrutarlos en cualquier época del año, en el supermercado hay gran variedad de frutos rojos congelados.
Los frutos rojos son tus aliados dulces de tu dieta keto
En la dieta keto o cetogénica no tienes que eliminar por completo el consumo de frutas, sino que tienes que elegirlas de forma inteligente, optando por aquellas que son más reducidas en hidratos de carbono.
Esas frutas son los frutos rojos, que tienen alrededor de 2 gramos de hidratos de carbono por cada cuarto de taza. Podrás de este modo darle un toque fresco a tus platos keto y añadir a tu dieta keto un extra de antioxidantes y de vitamina C.
¿Cómo tomarlas? Intenta que vayan acompañadas siempre por algo de grasa o proteína para que la subida de glucosa sea menor cuando las tomes. Por ejemplo, unas fresas con nata (nata montada sin azúcar), añadirla a tu ensalada, al yogur o en tus tortitas keto del desayuno.